ES NECESARIO NO OLVIDAR, PARA QUE NO VOLVA A OCURRIR, TAMBIEN ES OBLIGATORIO DEJARLO EN UN COSTADO DEL CAMINO Y CONTINUAR EL ANDAR.(es una parte de la conclusión que llegue) Y sí….me tome el viernes para mí y mi conciencia, en la casa de veraneo de mi papá y descubrí que a 45 minutos de mi casa tengo un paraíso terrenal(a mi entender) donde los únicos sonidos que se oyen es el viento y el mar, que por ser un fin de semana largo a veces era interrumpia por el ruido de un auto.
Eso fue el viernes, el sábado, él silencio se hizo reencuentros ya que nos reunimos el grupete de amigos (eso amigo que hace mas de 15 años nos frecuentamos desde que compartíamos la entrada de un boliche y una caminata de vuelta acá en las hermosas noches de verano).Y también las entradas o salidas del colegio secundario.
Lo más maravilloso aunque suena cursi es salir a la terraza y ver la luz del faro, que alumbra y guía a los barcos en alta mar.
“Todos los imperios tienen su ocaso, que los reyes también mueren, que no hay poder infalible.”
Y el domingo el típico almuerzo familiar de pascuas, ordenar todo y desandar ese camino de 45 minutos que nos regresa a casa. Con la promesa de volver cada vez que necesite meditar y desconectarme del mundo sin bajarme de él.
lunes, 24 de marzo de 2008
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