
-UPS!! Me dolió (le dije).
-Que no te duela, que vos sos más inteligente de lo que muchos piensan. Me duele mucho algunas cosas que no volveré ha hacer. Pero hace más de 7 meses que hago todas las semanas lo mismo. Tomo mi auto y recorro los kilómetros necesarios y llego.
Voy por la calle Bolivia, cruzó la avenida García Matin, Ruy Díaz de Guzmán y estaciono, en Pi y Margall y observo el edificio.
-¿Que pretendes que te diga?
-No lo se, o tal vez me digas si hago bien o mal?
-De mi no vas a obtener semejante respuesta, no soy ni me siento capaz de juzgarte, ni de juzgar a nadie. Es más no se que esta bien y que esta mal, a estas alturas. Las cosas se dan por algo y nadie debe interferir. Para que las cosas no sucedan, o para que sucedan.
-Puede ser que tengas razón.
- No lo se, sólo se que siempre hay alguien que esta dispuesto/a a ayudar al otro, sin pedir nada a cambio, solo que a veces no lo vemos.
- O lo vemos solo cuando necesitamos.
-También… disculpa que me quede pensando… ¿Por qué gastas tiempo en ir y estar ahí?
- Todos tenemos alguna locura…
- Jaja! Si es verdad. Yo a la única casa que voy es a la mía y a la de mi novio. Y si voy a alguna es si me invitan…
- No pretendo que me entiendas, solo quería hablar con alguien, que tal vez en algún momento me entienda.
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